IGLESIAS DE USSEL, SECRETARIO DE ESTADO DE UNIVERSIDADES, DA SU APOYO AL FRAUDE ACADÉMICO DE LOS CONGRESOS EN UNA CARTA QUE REVELA EL DIARIO EL 9 NOU

En su edición del 29 de diciembre, el periódico catalán El 9 nou publicó un extenso reportage de tres páginas en el que se exhibieron las pruebas que demuestran las corruptelas del congreso, tales como actas notariales de abstracts absurdos colgados en la red, a la vista de todo el mundo (y aceptadas, evidentemente, por el comité científico) o como la carta de respuesta del comité de Zaragoza que daba por buena la comunicación neonazi.

Sin embargo, otra novedad importante del reportage radica en que se hizo pública la carta de apoyo del Secretario de Estado de Universidades, Julio Iglesias de Ussel a los organizadores, a los pocos días de la publicación en El País, y sin investigar de ninguna manera lo que realmente había sucedido.

Políticos que insultan antes de pensar

Artículo de Guillem Bou, a raíz de la revelación hecha por el diario catalán El 9 Nou.

Diversos medios de comunicación se hacían eco en octubre y noviembre del escándalo de los congresos universitarios organizados por la UAB, la UPC y la UB. Las declaraciones al respecto del director del ICE de la UAB no pueden ser más clarificadoras: no se leían los documentos. Estos documentos, o comunicaciones en el lenguaje universitario, los mandaban los investigadores y, previo pago de 30.000 pesetas, eran publicadas por estas universidades.

Además de esta "confesión" hay otras pruebas, como ahora el acta notarial que demuestra que un texto lleno de tonterías ha estado expuesto en el web site del congreso durante seis meses. O las cartas del comité científico, en las que se comunicaba a los "autores" de nombre rimbombante que su aportación, previa lectura del comité científico, había sido calificada positivamente y apta para ser publicada.

Con todo ello, los responsables no han pedido disculpas ni a la comunidad universitaria ni a la sociedad. Se han limitado a justificarse alegando que era un congreso con muchas aportaciones. Científicos más rigurosos advierten que un congreso de temática tan amplia como "educación y diversidad" nunca podrá ser serio. También argumentan los organizadores que, misteriosamente, se produjo un cambiazo de comunicaciones en el sistema informático.

Excusas de mal pagador. Pero lo grave no está aquí. Lo grave es que, estas personas, según ha revelado esta semana el periódico catalán El 9 Nou, después de ir a contar su versión de los hechos al Secretario de Estado de Universidades, Julio Iglesias de Ussel, obtuvieron una carta de apoyo que no tiene desperdicio.

Iglesias de Ussel tacha de "mezquino" y "mediocre" a quién ha provocado que se descubriera el pastel del fraude académico. Califica a los organizadores, esos que cobraban los textos sin haberlos leído, de "personas rigurosas, responsables y esforzadas al servicio de la comunidad científica". Y, para terminar, les felicita por la realización del congreso.

La postura de este Secretario no deja de ser chocante. Por una parte, se atreve a defender desde el desconocimiento más absoluto la calidad de un congreso concreto (mientras en la comunidad universitaria proliferan artículos en sentido contrario). Por otra parte, en vez de exhibir un razonamiento elegante, profundo o simplemente polémico, exhibe insultos y menosprecio en una carta de sólo once líneas.

¿Le preocupa a este hombre la calidad de nuestras universidades? ¿Está dispuesto a realizar una tarea seria de análisis del problema de la corrupción universitaria? ¿Va a resolver el problema de los científicos en el exilio que afecta a la universidad española y que ya ha denunciado en diversas ocasiones la revista Nature? Parece que no está dispuesto a semejante ejercicio intelectual. Más bien debemos observar que quizá se trate del perfil de un nuevo hombre de estado: el que insulta en vez razonar y trabajar.